El confinamiento en casa es sin lugar a dudas la mejor herramienta para evitar el contagio, sin embargo, hasta en lo más duro del confinamiento, muchos de nosotros, nos hemos visto obligados a coger el coche para desplazarnos hasta nuestro centro de trabajo.

El confinamiento en casa es sin lugar a dudas la mejor herramienta para evitar el contagio, sin embargo, hasta en lo más duro del confinamiento, muchos de nosotros, nos hemos visto obligados a coger el coche para desplazarnos hasta nuestro centro de trabajo. Es por ese motivo, que las estaciones de servicios y gasolinera han sido y serán una parada obligatoria para la mayoría de nosotros, pese a la situación de la pandemia. Por eso queremos dar unos breves consejos para minimizar al máximo el riesgo de contagio por COVID a la hora de repostar.

Lo primero y fundamental, utilizar en todo momento mascarilla y mantener la distancia de seguridad en la medida de lo posible. Si se trata de repostaje autoservicio y debemos acceder a la zona de tienda para pagar, sería buena idea utilizar una mascarilla FFP2 que filtra mucho mejor que las quirúrjicas e infinitamente mejor que las higiénicas. A parte del momento de pagar en la zona de tienda, el otro punto de riesgo es el propio repostaje, donde tendremos que manipular la pistola de la manguera, al igual que hacen decenas o centenares de personas al día, arriesgándonos a exponernos al virus de alguna de esas personas que repostó con anterioridad. A la hora de coger la manguera, o de manipular los botones o consola del surtidor, es fundamental usar guantes desechables en ambas manos. En particular estos botones o las pantallas, son un importante foco de gérmenes. Una vez finalizado el repostaje, debemos quitarnos los guantes sin tocar la parte exterior de los mismos, desde la muñeca metiendo los dedos y del revés. La supervivencia del virus depende de muchos factores, uno de ellos, es el tipo de superficie. Donde más sobreviven es en una superficie metálicas y el plástico, hasta dos tres días viven en plástico y acero inoxidable.

Una vez finalizado el repostaje y antes de acceder al interior del vehículo, es importante desinfectar nuestras manos con gel hidroalcohólico, para evitar espacir cualquier resto del patógeno por el interior de nuestro coche.

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